Testimonios
A lo largo de mi vida, siempre había sido muy escéptica y lejana a todos los procesos energéticos o cualquier solución que viniera de alguna persona que no fuera un médico. Me costaba mucho trabajo entender que alguien pudiera creer en todas estas cosas. Me sonaban a un absoluto engaño y charlatanería. Hace año y medio, me tocó pasar por un proceso difícil. Estaba sin trabajo y tratando de emprender. Con muchos cuestionamientos de hacia a dónde debería dirigir mi esfuerzo y atención. Un día de esos grises, recibí la llamada de Milly invitándome a tomar un curso. Mi primera reacción fue buscar un pretexto no obstante, podía y tenía el tiempo para hacerlo. Mis hijos me insistieron en que tomara la oportunidad, que era por algo y que no perdía nada. Finalmente le hablé a Milly, le confirmé mi participación, e hice el pago para forzarme a no faltar. Con pocas expectativas y ganas, comenzamos el primer día. Muchas cosas de las que ahí se platicaron, empezaron a hacerme sentido. La paz y seguridad con la que Milly transmitía sus propias experiencias, enriquecidas con la participación de otras personas comenzó a entusiasmarme y a cambiarme el chip. Decidí tomarlo en serio y leí bien el manual, me concentré y todos los días, después de cada clase, puse en práctica los ejercicios y recomendaciones. Cabe mencionar que, soy una persona que le gusta hacer las cosas en serio. Poco a poco, me fueron cayendo en cuenta miles de cosas, al grado tal, que llegué a tener una catarsis. Hubo todo un día que se me removieron tanto las emociones y que desperté tantas cosas que uno va ocultando y tapando para evitar sufrir, que lloré como una loca. Me sentía triste y débil, pero con un sentimiento genuino de tranquilidad. Sentimiento raro de entender. Me paré, empecé a balancearme, escuché desde dentro, todo lo que mi cuerpo me decía y pedía, cerré los ojos, y experimenté un sentimiento de felicidad lleno de colores……..mi niña interna se volvió a meter adentro de mi cuerpo, se reconcilió conmigo, nos hicimos una. Prendí una vela, hice un círculo con mis hijos y lanzamos todas nuestras peticiones y agradecimientos al universo, volví a llorar mucho. No podía creer que, lo que estaba haciendo me daba paz y felicidad. Al poco tiempo, como algo mágico, todo empecé a fluir y se empezaron a dar las cosas de forma espontánea, sin tener que seguir partiéndome la cara para que todo ocurriera. Me siento y soy muy afortunada, de haber aceptado y de darme esta oportunidad de vida. Recomiendo el curso ampliamente, de verdad. Es sanador, reconciliador, mágico e increíble. Hay que seguir trabajando, no olvidar y tener presente lo entendido y conscientizado. La vorágine de la vida nos arrastra y perdemos de vista lo importante, escuchar a tu cuerpo y mantenerse en la línea a seguir, sin perder la calma y la cabeza tratando de solucionar todo a la fuerza. Me parece que este curso, hay que reforzarlo como regalo personal una vez al año. Me encantaría poder tomarlo con mis hijos. Me parece que es una grandiosa herramienta de vida. Finalmente Milly, te quiero agradecer por tanto. Por seguir y nunca claudicar en convencerme de que hay otros caminos y de que no todo es difícil y se corona gracias al esfuerzo. Las cosas también se deben de disfrutar y nos las merecemos y eso, eso, es lo que te da esa felicidad y calma en el camino de la vida. Gracias Milly, mil gracias! También agradezco a todas las personas que participaron activamente, abriendo su corazón con vivencias que siempre reconfortan y que son un aliento para echarle ganas!!!! Te quiero mucho Milly querida. Tu amiga la EX ESCÉPTICA!!!!
Soy muy afortunada de haber tenido la oportunidad de tomar tu curso y que formes parte de este gran proceso de mi vida. El Método Konsio me ha cambiado la vida de una manera impresionante y ha llegado en el momento indicado, ha sido una experiencia que le ha dado un curso muy diferente a mis pensamientos, sentimientos y entorno. El mayor miedo de una persona es el perder algo o a alguien que representa mucho en nuestra vida, YO tuve la pérdida de mi abuelita materna hace 14 años y ese dolor y miedo no lo supe expresar ni sacar cómo debía, los reprimí de una manera terrible, puse un muro entre lo que sentía y lo que expresaba abandonándome a mi misma. Hace poco más de 1 año, tuve una situación muy fuerte cuando asaltaron a mi papá y se estaba debatiendo entre la vida y la muerte, me invadió nuevamente ese miedo y empecé hacer lo mismo que hice cuando perdí a mi abuelita, reprimir mis sentimientos y no expresar nada. El curso me hizo descubrir que todo ese miedo y sentimientos de pérdida y dolor reprimidos los canalicé en las Mariposas, uno de los animales al que más miedo y pavor tenía, el ver una mariposa cerca mío o que pasara a mi lado, me ponía muy nerviosa, me sudaban las manos, me hacía falta la respiración…en pocas palabras me ponía muy mal. Durante el curso descubrí que en ambas ocasiones había una Mariposa negra físicamente o en mis sueños y por eso comencé a tenerles pavor, pero también pude enfrentarme a ellas, agradecerles por el mensaje que habían traído para mi y entender que no me harían daño; pude pedirle perdón a la niña que abandone después de la muerte de mi abuelita, entender que el dolor es normal, que no está mal sentirnos vulnerables y que no puedo reprimir ningún sentimiento. Puedo decir que en estos momentos de mi vida me siento más libre de expresarme, de llorar, gritar, enojarme y hasta de sentirme vulnerable por cualquier situación, siento que he recuperado la confianza en mi y en quien soy. Ahora no huyo de las mariposas ni de mis propios sentimientos y aunque me ha costado mucho trabajo aceptar todo esto y ha sido una lucha constante… me ha ayudado a enfrentar mi embarazo de la mejor manera posible, a pesar del echo de estar sin mi pareja, a que mi bebé después de tener un embarazo de alto riesgo y estar constantemente en peligro, ahora sea una bebé muy sana y se esté desarrollando mucho mejor. Gracias Milly por compartir este Método con nosotros y guiarnos para poder tener una vida libre de nuestros propios miedos. “LIBRES DE NOSOTROS MISMOS!”.”
El curso fue maravilloso en todos los sentidos! Milly nos ayudo a llegar a esas emociones que no se pueden catalogar como buenas o malas, pero que de algún modo nos tenían atorados en nuestro desarrollo personal Nos enseñó muchas técnicas para sanar y liberar esa emoción o energía retenida y a partir de esto poder ver el mundo desde otra perspectiva más consciente, más empática, más en armonía contigo mismo y con los que te rodean. Fue un curso sanador y liberador que te permite agradecer por lo que eres y lo que tienes para partir de ahí a un verdadero crecimiento. Es impresionante cómo Milly maneja tan magistralmente tanto conocimiento y cómo lo transmite de una forma sencilla y fácil de entender y a la vez sabe hacerlo con un cariño y sensibilidad extraordinaria. GRACIAS!